"(...) Lento, muy lento el paso de los minutos. Y sentías caliente, tu propia y agitada respiración. Y tu aliento agrio. Y la boca cada vez más seca. Y aunque no quisieras, fugaz te llegaba la alarma por las cosquillas en la nariz, y ya jurabas que te dolía la cabeza, y el cuerpo, y los ojos...y la mente. (...)"
Samaniego, Fidel. "'¿Y ahora qué sigue, qué más va a pasar?'". El Universal, México, D.F., martes 28 de abril de 2009
2 comentarios:
Mira, yo estoy angustiado ahora no por la influenza sino porque mi espacio vital ha sido drásticamente reducido y estoy, literalmente, como león enjaulado. De hecho soy igual de peligroso: si me pones enfrente a José Ángel Córdova lo mordería y desgarraría hasta hacerlo tiras. Y a Calderón también. Carajo, hasta a Lucerito (y mas si se le ocurre hacer un spot de la influenza. Bueno, ya rugí y dejé corto al león de la MGM (otra vez)
muchas veces,la autosugestion aflora en nosotros,por el entorno en que vivimos,television,radio,prensa,internet...nos machacan,nos bombardean,nos debilitan la mente tanto,que llegamos a ser muñecos a su antojo.Saludos
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